lunes, 29 de junio de 2009

Blancanieves y los 7 enanitos

Hacía tiempo que no me reía tanto. Anteayer, cuando llegué a la redacción encontré una carta sobre mi mesa. Estaba escrita a mano, y me llamó la atención. Al cogerla, vi que sus trazos eran gruesos, irregulares e infantiles. La abrí con curiosidad y a medida que iba leyendo, en mis labios se iba dibujando una sonrisa que rompió en una estrepitosa carcajada. Cuidadosamente la guardé en mi bolso y pasé el día mirando el reloj, estaba ansiosa porque fueran las nueve, me moría de ganas de compartir “aquello con las chicas”. Daban las nueve cuando entré en el restaurante, le pedí un manhattan a Gabi y volví a releer la nota mientras esperaba a mis amigas. Cuando llegó la última les dije que tenía algo importantísimo que contarles. Desplegué una hoja de papel y leí: “Hola. Soy Mónica y tengo cuatro años. Mi mamá siempre te lee y dice que eres guay, pero yo no te quiero porque nunca cuentas cosas ni para mí ni para Nacho (escribe él, yo no sé), sólo para mamá y tita. Nosotros también queremos ir guapos. Adiós“. Primero estupefacción, después sonrisas, luego risas y por último la promesa de que esta columna sería para los niños.
En la FMI hemos visto las propuestas de los diseñadores infantiles para la primavera-verano 2010. La colección marinera de DC Kids, en rojos, marinos y blanco, inspirada en Saint-Tropez está llena de glamour. Las niñas coquetas y clásicas se encontrarán cómodas con las Flores XXL en tonos verdes, azules o coral de Oh Soleil. El toque hippie lo ponen las rosas y las margaritas desbordantes de luz y color de Agatha Baby. Para los junior más modernos AKR nos presenta una colección en blanco y negro combinada con colores primarios y motivos pop y geométricos para los niños y con volúmenes, frunces y estampados bitono para las niñas. El parque, los columpios, las vacaciones requieren ropa adecuada o lo que es lo mismo, Denim y camisetas tintadas con aire desgastado en amarillos, azules y naranjas de Bóboli y para el campamento de verano Cakewalk propone en lila, vede claro, rojo, amarillo, la impresión fotográfica, a veces tridimensional, sobre felpa. Divertidísimo el impermeable que se guarda en su bolsa y se convierte en una flor. Las princesitas tienen su look total en las faldas de vuelo y los boleros blancos y azules, con bordados o grandes lunares de Lourdes, en los cuadritos de vichy y los lunares rojos, rosas, verdes y azules de MM-Pi o en los volantes de Tuc Tuc. En Oca-loca cada traje tiene un zapato perfecto: mocasines valencianos, palas trenzadas o sandalias con flecos, lazos, borlas o lentejuelas, en plata, oro, fucsia, rojo, blanco y negro. ¿Querrán Mónica y Nacho ser ahora mis amigos?

El aviador

Una crisis nerviosa. El viernes tuve un ataque de nervios. Fue horrible. Por unos segundos me sentí desamparada, perdida igual que Chencho el día de Navidad. Ellas siempre van conmigo. En invierno, en verano, de día, de noche, con sol, con lluvia nieve o viento. Casi siempre están en su lugar, aunque a veces se apoyan en el pecho o descansan sobre mi cabeza y sólo, a altas horas de la noche, duermen en el bolso, pero el viernes no estaban en ninguno de esos sitios y me angustié, me angustié mucho. No puedo salir a la calle sin ellas, son parte de mí, las necesito. Si alguna vez las olvido, esté donde esté, vuelvo a buscarlas. Siempre están allí esperándome. Entonces las cojo, me las pongo y salgo fuerte y segura a enfrentarme con el mundo, por tanto era imposible que las hubiera olvidado, lo que sólo podía significar una cosa, que las había perdido. Y eso era realmente grave. A Gabi casi se le cae la bandeja cuando di un grito al comprobar que tampoco estaban en el bolso. Una de las chicas intentó calmarme mientras otra las buscaba por el suelo y la tercera me quitaba la cartera y volvía a mirar dentro. A los pocos instantes, sonriente, alzó un estuche. Lo abrió y … ¡Sorpresa! En su interior estaban mis adoradas gafas de sol. Respiré, y ya, relajadamente, con un manhattan en la mano les propuse hacer un recorrido por las miradas del verano.
El blanco al igual que el tamaño XXL, los anchos armazones de plástico y los colores vivos son tendencia. El complemento más chic ha de ser elegido cuidadosamente y con perspicacia, por eso mis amigas llevan cada una un estilo distinto de gafas. La de la carita redonda siempre escoge gafas de líneas rectas, otra tiene la frente ancha y las lleva redondeadas, la tercera, que es de rostro anguloso, las elige de formas curvas. y yo siempre las más fashion. El must have de la temporada son las Carrera, extra large, en rojo o amarillo ámbar. La tendencia de modernidad, provocación y originalidad la marcan las gafas galácticas estilo Star Treck, en todos los colores, incluso con luces que decoran la montura o el cristal. Son la estrella del verano. Las de mariposa de Guy Laroche, con grandes formas ovaladas o cuadradas y decoradas con strass de Swarovsky resultan seductoras y sensuales a la par que elegantes. La colección estilo vintage, inspirada en los 60 y los 70 de enormes formas y glamourosa decoración con embellecedores metálicos de Victorio & Lucchino es muy madura y tremendamente sofisticada. Sobrias y funcionales pero contundentes son las gafas en tonos tierra, negro o piedra de Adolfo Domínguez inspiradas en la naturaleza. ¿Alguien no quiere tener cuatro ojos?