lunes, 9 de febrero de 2009

Cantando bajo la lluvia

Llueve, llueve y llueve sin parar, un día tras otro y yo no tengo nada que ponerme lo cual hace que me ponga de un humor imposible porque si hay algo que odio es no ir adecuadamente vestida en cada momento. ¡Sí! Tengo varias gabardinas pero no voy a ir siempre con lo mismo y con tanto viento, nieve y lluvia o repito modeli o voy mal así, así que ante esta disyuntiva elijo la reiteración, lo cual ha hecho que hasta el viernes noche mi mal humor fuese mi estado de ánimo habitual pero durante la cena del viernes las chicas, como siempre, acabaron con mi disgusto. Mi cara, cuando llegué esa noche al restaurante, hablaba por sí sola, tanto que Manolo al verme entrar, masculló entre dientes un, hoy será mejor que me mantenga alejado. Las chicas, ni que decir que se percataron en un santiamén de que algo pasaba pero optaron por dejar que yo les contara y sin demorarme en saludos banales les espeté lo que había estado amargándome toda la semana. Rápidamente se solidarizaron conmigo y además me dieron la solución instantáneamente, al día siguiente debía ir a comprarme una gabardina y un trench, los must haven de la temporada. ¡Claro! Esa era la solución a mis problemas. Les aseguré que mi agradecimiento sería eterno y para demostrárselo las invité a una ronda de manhattan. La elección fue realmente complicada entre tantos modelos. La colección de Banana Republic es muy chic, muy neoyorquina con sus impermeables trench en colores rojos, fucsias, amarillos… Superjuveniles las de Benetton en cuadritos de vichy blancos y negros y qué decir de los diseños del creador de la gabardina, Thomas Burberry, en tonos piedra, azul pizarra, corteza, champiñón, lavanda, morado, rosa pálido gris o verde salvia; ligeras y desestructuradas, o clásicas, con estampados degradeé, o con multitud de colgantes y botones sobredimensionados. Las de Dolcce y Gabana resultan majestuosas con sus volcánicas capas. Las gabardinas han sido siempre la prenda fetiche de los gángster tipo Andy García en El Padrino y por supuesto de Humphry Bogart en Casablanca y de los detectives como Colombo y Sherlock Holmes en quien se ha inspirado Carolina Herrera para crear unas prendas a cuadros, con mangas perdidas y capelina ideales para vivir una misterio aventura. Las de Roberto Cavalli en el clásico beige tienen un cierto sabor Folk con estampados florales, pero sin duda las más sencillas y elegantes son las de Hermés. Nuestra indumentaria para luchar contra las inclemencias del tiempo no estará completa hasta que no tengamos el gorro con visera, el paraguas y los guantes adecuados para cada gabardina que encontraremos en Ralph Laurent. Ahora si que puedo cantar bajo la lluvia, pero… ¿Seguirá llorando el cielo al ritmo de mis canciones?