martes, 18 de marzo de 2008

El Padrecito

Mirando el calendario para ver cuando cae este año la Semana Santa, me di cuenta, con horror, de que el día del Padre era ya, así que recogí mis papeles, y a la hora de comer hice una escapada para comprarle a papá su regalo, como toda buena hija. La verdad que es una lata porque el cumple de papi y su día institucionalizado, son vecinos, con lo cual, nunca sé que regalarle.
Iba pensando en esto cuando al pasar por delante de mi perfumería favorita, instintivamente miré hacia adentro, y allí, rebuscando entre los estantes de colonias y perfumes estaba una de las chicas. Entré, me acerqué sigilosamente a ella y en voz muy suave le dije: No, no. Todavía no has dado con el adecuado. Estaba tan enfrascada en el mundo de los olores que al oír mi voz casi se le cae la botellita que tenía entre las manos. Las dos habíamos tenido la misma ocurrencia así que pensamos que sería más divertido comprar juntas el perfume para nuestros padres. Como teníamos poco tiempo, había que volver al trabajo, no nos pudimos demorar mucho y después de pedir consejo a la dependienta y oler varias colonias nos decantamos por dos clásicos (con los papás no se experimenta, para eso ya tenemos la gaseosa), mi amiga por las notas cálidas y refinadas de Loewe y yo por la fragancia profunda y personal de Habit Rouge de Guerlain.
Cuando esa noche llegué al restaurante, llevaba en el bolso unas muestras del último perfume de Tom Ford for men que es atrevido, provocativo e irresistible y cuando Gabi nos trajo los manhattan, se las regalé, le hicieron mucha ilusión porque había oído hablar de él pero todavía no había podido probarlo. Las chicas que aún no sabían que regalar a sus padres, al ver las cajitas resolvieron su problema, ¡Cómo no se les había ocurrido! Estaba clarísimo: perfume. Y de esta forma comenzamos un debate sobre cuál era el más apropiado para cada padre.
The One de Dolce y Gabbana con su aroma oriental y un poco picante es muy moderna pero resulta más conveniente para un ligue. Kouros de Yves Saint Laurent es una esencia romántica que debería regalar mami a papi. Una buena elección es Boss Pure de Hugo Boss, ideal para caracteres enérgicos aunque muy fresquita. Al final las chicas se decidieron por valores seguros. Una se inclinó por Eternity for men de Calvin Klein, sensible y refinada, su padre tiene alma de poeta y la otra optó por la siempre elegante y sofisticada Emporio Armani de Giorgio Armani... Al día siguiente después de comprarlas nos tomamos el aperitivo a su salud. ¿Dejarán las colonias en ellos la misma huella que dejan nuestros padres en nosotras?

4 comentarios:

Johnny Crunch dijo...

Hola María
Estoy encantado con esta nueva versión de tus artículos en formato digital. Estoy deseando leer el siguiente. Lo espero con ansia.

un nuevo e-lector
dani

Johnny Crunch dijo...

Me encantan tus artículos

dani

Anónimo dijo...

Qué sorpresa. No me lo podía creer. Salía yo de excursión por la red, como un cazador tranquilo, como un ojeador nervioso y me di de bruces con tu blog. ¡Qué cara se me quedó, qué callado te lo tenías! Ya eres una chica chic digital. Ya eres la bomba. Qué locura, y yo sin idea de en que mundo me metía. Ya te digo. Tu caballero andante y tirado en algún punto de internet.

Anónimo dijo...

Desde hace un mes me he enganchado a tus divertidos artículos. Los leo en la edición impresa de Odiel, pero ahora será mucho más fácil en este formato digital. Sigue así...

Carrie B.